Existen cuando menos 5 ó 6 versiones de su fecha de nacimiento. La más aceptada es la del 11 de diciembre de 1916. Nació en Matanzas, Cuba, en la misma Matanzas que fue cuna de Miguel Faílde, el creador del danzón. Es ahí donde comienza a estudiar el piano y donde hace sus pinitos profesionales, cuando el joven Dámaso llega a La Habana vive intensamente la llamada época de oro del son cubano.
El joven pianista consigue pronto colocarse en algunos grupos musicales que tocaban en lugares famosos, es en una de estas agrupaciones que conoce al cantante Orlando Guerra, que la escena musical conocía mejor como "Cascarita", y por recomendación de él, en 1942, entra a una de las mejores agrupaciones de la isla: la orquesta Casino de la Playa.
Pérez Prado, apoyado por su trabajo en la Orquesta Casino de la Playa, llegó a México con apoyo de algunos de sus compatriotas que se encontraban ya establecidos, como Ninón Sevilla, Beny Moré y Kiko Mendive. Al poco tiempo forma una orquesta con la instrumentación del tipo de las grandes bandas de jazz, adicionadas con la imprescindible percusión afrocubana, creando un sonido que sería desde entonces su sello y con el que crearía el estilo del mambo, en donde el verdadero solista es la orquesta.
Desde ese momento el mambo se convirtió en la gran atracción del sexenio que presidía Miguel Alemán, formando parte de la escena popular con mambos dedicados a los ruleteros, o a los estudiantes del Instituto Politécnico o de la Universidad, en una época en que la vida nocturna parecía presagiar tiempos mejores. El éxito del mambo al comenzar la década de los años cincuenta fue rotundo.
La vida personal y musical de Pérez Prado vivió siempre ligada al mambo, a pesar de sus esfuerzos por crear y popularizar otros "ritmos" como el suby o el dengue.
El mismo Pérez Prado adquirió la nacionalidad mexicana en 1980 para pasar los últimos años de su vida como ciudadano del país que lo acogió y lo lanzó al mundo.
Anécdota
La figura poco común de Pérez Prado comenzó a ser muy familiar para el gran público y quizá por lo exacto del apodo, el mote de car'efoca se le quedó, a pesar de que sólo surgió como una mera ocurrencia en medio de una grabación, en que el gran Beny Moré al contestar la pregunta:
"¿Quien inventó el mambo que me sofoca?", respondió "un chaparrito con car'efoca."
MAMBO YAMBO
MAMBO, QUE RICO MAMBOMAMBO, QUE RICO ES, ES, ES
MAMBO, QUE RICO MAMBOMAMBO, QUE RICO ES, ES, ES